Hoy vengo para empezar una nueva serie... ''ES SUFICIENTE''
Que tratará de una chica, muy desafortunada, como llegará a convertirse en la mejor. Pero, eso, será difícil.
He aquí el primer capítulo.
Hola... Yo soy Leah, Leah viene del hebreo, y significa: ''cansada, melancólica''. Esos son los adjetivos que describen mi vida. Yo nunca he tenido amigos, y me siento muy sola. En el colegio todos se ríen de mí, de mi cara, de mi pelo, de mi ropa, de todo... Siempre buscan algo para hacerme llorar. Cuando yo se lo digo a mi madre ella me pega, y tengo morados por todas partes, pero no se lo digáis a nadie, cuando las profesoras me preguntan que como me he echo esos moratones, yo respondo, que me caí en el parque, porque me da mucha vergüenza decir la verdad.
Me voy a la cama, es tarde. Pero antes de eso iré a prepararme la mochila.
-Matemáticas, lengua, e informática, vale...-me digo a mi misma, porque no tengo a quien decírselo-
En ese momento me fuí a la cama y empezó el día de hoy...
POR LA MAÑANA
Mi madre me empieza a tocar el brazo y yo enseguida abro los ojos. Bostezo un par de veces y me estiro unas cuantas más, y voy a vestirme. Después el desayuno está listo y voy a por el. Me siento en la mesa, un poco sobada, mientras me bebo el zumo. Al cabo de un rato es hora de ir a la escuela. Me entran ganas de llorar, pero me contengo. Me pongo la chaqueta y pongo la mochila en mi espalda. Le doy un beso a mi madre y salgo de casa, sola.
Al salir a la calle, veo a todos los niños de mi escuela. Y cuando voy por la calle el único sonido que hay es:
-¡FEA! ¡ASQUEROSA! ¡VETE A TU PAÍS! ¡DAS ASCO!
Las lágrimas caen de mis ojos como una fuente. Me siento sola, y mal...
Al llegar a la escuela lo único que quiero en este mundo es que la tierra me trague y no volver a salir nunca más.
Pero en ese momento ya son las diez, y volveremos otro día, porque ya no tengo más fuerzas y ganas.Lo siento chicos.